lunes, 7 de marzo de 2016

Seis nuevas promesas como Salesianos Cooperadores



Para contribuir a la salvación de la juventud, “la  porción  más  delicada  y  valiosa  de la sociedad humana”, el Espíritu Santo, con la intervención materna de María, suscitó a san Juan Bosco. Y para que esta misión perdurara, el santo fundó dos institutos religiosos, los Salesianos y las Hijas de María Auxiliadora y luego  también  enroló a los laicos fundando la Asociación de los Salesianos  Cooperadores; que en la actualidad, están extendidos y trabajan en todo el mundo.

SER SALESIANO COOPERADOR NO ES PERTENECER A UN GRUPO  PRIVILEGIADO, SINO UNA VOCACIÓN DE DIOS QUE LES INVITA A SANTIFICARSE EN SU VIDA ORDINARIA ASUMIENDO LO QUE  APASIONABA A SAN JUAN BOSCO: LA SALVACIÓN DE LOS JÓVENES Y DE LAS CLASES POPULARES.


El domingo 6 de marzo de 2016, como cierre del Encuentro Zonal en Constancia, Sinaloa; se celebró la  Eucaristía donde seis nuevos hermanos, realizaron su promesa solemne, comprometiendo a ser fieles a lo que prometieron para construir una bella comunidad cristiana y salesiana. 

Les pedimos ahora, que   pidamos  a Dios por los que han hecho su promesa y por todos los que formamos parte de nuestra Asociación, para vivir a fondo nuestra vida cristiana y para asumir la misión de don Bosco para la salvación de los jóvenes.

Felicidades a: 
Clara Haydée Guerrero Rojo, del Centro San Francisco de Sales, Constancia y
Pablo Verdugo Cota, Hilda Judith Rentería Gómez, Sergio Estrada Aviña, Adrián
Verástica Valenzuela y María de Jesús Pérez Corral; todos del Centro María
Auxiliadora Reina del Valle de Los Mochis, Sinaloa.

Don Bosco el 15 de julio de 1886 afirmaba: “No es Don Bosco ¡Es la mano  de  Dios  que  se  sirve de los Cooperadores!.. Esta obra se extenderá   por  todos  los  países  y  se  difundirá  por  toda  la cristiandad...Los Cooperadores serán los que ayudarán a promover el espíritu católico. Será una utopía mía, pero la sostengo”.